La Iglesia es el Cuerpo místico de Cristo. Es «el sacramento universal de salvación» (Lumen Gentium, 48). La salvación nos viene de Cristo a través de la Iglesia.
«Nadie puede tener a Dios por Padre que no tenga a la Iglesia por Madre» (San Cipriano: De Unit. 6: PL 4, 519). La Iglesia, con sus elementos divinos y humanos, es objeto de fe.
En el Credo profesamos que creemos en la Iglesia una, santa, católica y apostólica.
Su Eminencia, Cardenal Francis Arinze, Prefecto Retirado,
Congregación para el Culto Divino, Vaticano : Homilía
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