Allocutio Concilium Legión de MaríaPor el P. Bede McGregor O.P.
Director EspirtualDublín - Irlanda
Frank Duff y el lugar de Nuestra Señora en la Legión
El mes pasado ofrecí un breve bosquejo del lugar de Nuestra
Señora en la vida interior de nuestro Fundador Frank Duff. Resumimos este lugar
en dos palabras: Consagración total o en las palabras del lema de San Juan
Pablo II: Totus Tuus, traducido como Yo soy todo tuyo. Frank le ofreció
toda su vida a María. Absolutamente nada le fue negado. Pero es sumamente
importante recordar el propósito de esta consagración total a María. Toda
auténtica devoción a María debe centrarse en Jesús. La misión de María es
mantener a la Iglesia siempre y radicalmente enfocada en Jesús y a través de Él
centrada en la Trinidad. Sus palabras para la Iglesia y para cada uno de
nosotros siempre serán las mismas: "Hagan lo que él les diga". En otra
perspectiva, María es una criatura diseñada y formada por Dios para mantener
toda la creación enfocada en el Creador. Entonces canta: "Mi alma
glorifica al Señor, mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador". La
vocación de María es permitir que toda la creación se regocije en Dios, el Salvador
del mundo.
Entonces Frank Duff quería que María tuviera el mismo lugar
en la Legión que ella tenía en su propia vida. Toda la Legión y cada miembro
debe al menos tratar de pertenecer totalmente a María para pertenecer
totalmente a Jesús. Básicamente, el Manual es una guía sobre cómo conocer y
vivir una auténtica devoción a María y especialmente bajo la tutoría de San.
Luis María de Montfort. Permítanme citar el Manual y algunos de sus otros
escritos para que podamos estar seguros de que estamos realmente en sintonía con
nuestro Fundador Frank Duff.
Él escribe: "La Legión tiene como objetivo traer a
María al mundo, como el medio infalible de ganarle el mundo a Jesús". O
"el primer y constante objetivo de la Legión ha sido reproducir en sí
misma la imagen de María, es la mejor manera de magnificar al Señor y tráaerlo a los
hombres. "O muy simplemente:" El espíritu de la Legión de María es el
de María misma. "Una de mis descripciones favoritas de la identidad y
misión de la Legión de María, se encuentra en El libro de Frank Duff. Montfort
el camino: 'Si María es vital para la espiritualidad común, ¿cuánto más para quienes
ponen su corazón en una vida poco común, cuyo objetivo es el apostolado? Jesús
no fue originalmente dado al mundo, y tampoco lo es ahora, salvo por María. La
Legión reconoce plenamente esto. Su título no pretende ser vacío. La Legión
está construida, de arriba a abajo y de principio a fin, sobre este principio
más potente de unión con María. Mediante un reconocimiento deliberado, completo
y filial en pensamiento, palabra y obra de ese principio, aspira a atraer a sí
misma esta fructífera, esta necesaria acción de María, y luego prodigará en las almas a través del medio de su intensa actividad. Finalmente: Las almas no son abordadas sino con María. Ese principio necesitará varias alocuciones propias más adelante.
Una vez más, descubro que no puedo hacer justicia a un tema
principal en la espiritualidad de la Legión dentro de un breve Alocutio. Pero
permítanme mencionar dos elementos importantes en el tratamiento de Frank Duff
de la consagración total a María. Primero, esta Consagración a María no es solo
para una élite espiritual. Está abierto a todos los cristianos sin excepción.
Señala cómo San Luis María de Montfort predicó la Consagración Total como una
parte esencial de sus misiones parroquiales en gran parte de Francia y sus
congregaciones normalmente eran simplemente feligreses comunes. En la Edad
Media, muchos católicos hicieron esta Consagración a través del Rosario. En los
tiempos modernos ha habido muchos santos del Rosario. Recuerdo cómo un hermano
le preguntó a San Padre Pío por qué rezaba tanto el Rosario todos los días y el
Santo respondió: "porque me aferra a Jesús". Eso es exactamente lo
que produce la verdadera devoción a María. Por supuesto, nosotros los legionarios
recordamos el artículo de Frank Duff: "El rosario es insustituible".
Hoy en día, probablemente no haya otra organización dentro de la Iglesia que
promueva el rosario más que la Legión en su vida interior y apostolado ".
Durante casi un siglo, ha habido millones de legionarios que han hecho esta
consagración total a María; Ella debe continuar testificando en la Iglesia y en
el mundo que la devoción a María es posible y extremadamente eficaz. Esta
devoción a María debería ser normal para todos los cristianos.
Sin embargo, como sabemos, esta Consagración Total a María
se vive de muchas diferentes maneras . La monja encerrada lo vivirá diferente a la mujer casada o soltera del mundo o al camionero y al médico,
etc. Lo que todos tienen en común es que ofrecen toda su vida y toda su
actividad a Jesús por María, pero sus vidas y circunstancias son muy
diferentes. Así que hay muchos aspectos diferentes o énfasis en cómo se vive la
Consagración Total. El aspecto esencial de la consagración legionaria a María
es la actividad apostólica. El P. Thomas O 'Flynn CM, un testigo clave de la
vida de Frank Duff, recuerda cómo a menudo advirtió contra lo que llamó' un
apostolado de la charla '. Para Frank Duff, la verdadera devoción a María debe
incluir acción, cooperación real con María en su cuidado materno del Cuerpo
místico de Cristo y la salvación de todas las almas. Con María, el Legionario
siempre debe estar de guardia para las almas, como lo expresa el Manual. Me
gusta decir que la verdadera devoción a María significa amarla con las mangas
enrolladas.
En conclusión, permítanme decir simplemente que la vocación
esencial de la Legión es promover en toda la Iglesia y el mundo una verdadera y
auténtica devoción a María. Es mi privilegio y deber como el actual Director
Espiritual del Concilium, animarlos a todos en esta sublime vocación que llevará
el magnífico fruto de Jesús y, a través de Él, una participación creada en la
vida de la Trinidad. Permítanme citar una vez más a nuestro fundador, Frank Duff:
debo ser perdonado por este último lapso de tiempo en lo personal; hubiera
deseado lo contrario. Pero deseo desesperadamente afirmar mi parentesco de
experiencia con todos esos incontables lectores de primera vez de la Verdadera
Devoción, quienes la considerarán extrema, y pueden estar dispuestos a decirlo
de manera desastrosa. Ese parentesco me da derecho a decirles que la culpa está
en ellos mismos. En realidad sólo ven a María como una amiga muy influyente,
mientras que ella es la madre misma de su alma; no como madre del nacido; ni
siquiera el bebé no nacido, pero más intensa, mucho más vital - la madre de
toda nuestra dependencia, como de Montfort gloriosamente la muestra, Madre de
Gracia. ’
